
Comenzó sus estudios en el Real Seminario de Nobles de Madrid y en la Escuela de Temporalidades de Málaga en 1786.
Ingresó posteriormente en el ejército español haciendo su carrera militar en el Regimiento Murcia.
Combatió en el norte de África y luego contra la dominación napoleónica de España, participando en las batallas de Bailén y La Albuera.
Con 34 años, en 1812, habiendo alcanzado el grado de Teniente Coronel, y tras una escala en Londres, partió a Buenos Aires, donde se le encomendó la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo (que hoy lleva su nombre), el cual logró el triunfo en el Combate de San Lorenzo.


Luego, utilizando una flota organizada en Chile, atacó al centro del poder español en Sudamérica, la ciudad de Lima, declarando la independencia del Perú en 1821.
Poco después se encontró en Guayaquil con Simón Bolívar, y tras una breve entrevista le cedió su ejército y la meta de finalizar la liberación del Perú. San Martín partió hacia Europa, donde murió el 17 de agosto de 1850.

En la Argentina se lo reconoce como el padre de la Patria y se lo valora como el principal héroe y prócer nacional.
En el Perú se lo reconoce como libertador del país, con los títulos de «Fundador de la Libertad del Perú», «Fundador de la República» y «Generalísimo de las Armas».
El Ejército de Chile le reconoce el grado de Capitán General.
