Las
comunicaciones se han convertido en una de las cuestiones
internacionales básicas de nuestro tiempo, no sólo por su
importancia para la economía mundial, sino también por sus repercusiones para el desarrollo social y cultural.
Dentro del mundo de las comunicaciones, la televisión es una de las
protagonistas clave, por su influencia cada vez mayor en el proceso
de adopción de decisiones, al haber sido los ojos del mundo en
muchos conflictos y otras amenazas para la paz y la seguridad, así
como por haber llamado la atención de toda la sociedad en
importantes cuestiones económicas y sociales.
El
avance de la tecnología está provocando un cambio profundo en la
forma en que se difunden contenidos televisivos y se accede a ellos.
Datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) revelan
que más del 55% de los hogares con televisión reciben ahora una
señal digital, frente a un 30% en 2008.
El
cambio veloz de la TV analógica a la digital se nota también en los
países en desarrollo, donde esta última modalidad se ha triplicado
en cuatro años. La UIT constata además que la TV por Internet es
cada día más popular, lo que unido a la diversificación de la
oferta a través de múltiples plataformas hace que la TV siga siendo
un medio muy valioso para informar y educar a amplios sectores de
población.
En
1996, la Asamblea General proclamó el 21 de noviembre Día Mundial
de la Televisión, una fecha que conmemora además la celebración
del Primer Foro Mundial sobre ese medio en la ONU. En la
resoluciónresolución
51/205
se invitaba a los Estados a observar ese Día promoviendo
intercambios de programas centrados en la paz, la seguridad, el
desarrollo económico y social y la cultura, entre otras cuestiones.
Dentro
de las televisiones comprometidas con esas causas está la de las
Naciones Unidas, que emite, entre otras series, La ONU
en acción,
que informa de la labor de la Organización y sus agencias en todo el
mundo.