Festejo en la capilla bajo su patronazgo en Itatí.
¡Madre nuestra del Rosario de San Nicolás!,
que tu presencia renueve nuestra vida,
alivie nuestro ser agobiado
por el sufrimiento y la enfermedad,
sostenga nuestra docilidad a la gracia
y fortalezca nuestro amor a los demás,
convirtiéndolos así en testigos del amor del Padre
que no vaciló por tu intermedio,
en darnos a Jesús. Amén.